El fútbol argentino vivió una noche inolvidable en el estadio Monumental Presidente Perón de Córdoba, donde Independiente Rivadavia de Mendoza se consagró campeón de la Copa Argentina 2025, tras empatar 2-2 con Argentinos Juniors y vencerlo 5-3 en la definición por penales.
Fue una final cargada de emociones, que marcó el primer título nacional en la historia del club mendocino y consolidó su gran crecimiento tras el ascenso a Primera División.
El conjunto dirigido por Alfredo Berti superó todas las adversidades: jugó con dos hombres menos, perdió a su arquero titular por lesión y terminó el encuentro sin su entrenador en el banco, tras una expulsión. Sin embargo, el espíritu de lucha y la entrega de la Lepra mendocina fueron más fuertes que las circunstancias.
“Fue una noche inolvidable para nosotros y para todo Mendoza. Este grupo demostró carácter y unión”, expresó uno de los jugadores tras levantar el trofeo.
Un inicio soñado y un cierre de infarto
El partido comenzó de la mejor manera para Independiente Rivadavia. A los ocho minutos, Alex Arce conectó de cabeza un centro de Alejo Osella y puso el 1-0 ante la sorpresa de Argentinos Juniors.
El “Bicho” intentó reaccionar con dominio del balón, pero la defensa mendocina se mantuvo sólida, hasta que Maximiliano Amarfil fue expulsado antes del descanso por doble amarilla.
En el complemento, Matías Fernández amplió la ventaja a los 16 minutos tras una gran asistencia de Sebastián Villa, pero Argentinos respondió rápidamente con un gol de Alan Lezcano. A partir de allí, el duelo fue una montaña rusa: el DT Alfredo Berti fue expulsado, Ezequiel Centurión se lesionó y fue reemplazado por el arquero suplente Guido Marinelli, y luego Osella vio la segunda amarilla, dejando a la Lepra con nueve hombres.
Con el tiempo cumplido, Erik Godoy marcó el empate 2-2 de cabeza y llevó la definición a los penales, donde la tensión fue absoluta.
Marinelli, el héroe inesperado
En la tanda decisiva, Independiente Rivadavia mostró nervios de acero. Convirtieron Luciano Gómez, Iván Villalba, Nicolás Retamar, Sheyko Studer y Sebastián Villa, quien selló el gol del campeonato.
Por el lado de Argentinos, Tomás Molina falló su remate ante la gran atajada de Guido Marinelli, el arquero suplente que se transformó en héroe y símbolo de la hazaña.
“No lo puedo creer. Entré en un momento difícil y traté de disfrutar. Esto es para toda la gente de Mendoza”, dijo Marinelli entre lágrimas, tras la consagración.

Un título histórico para Mendoza
La Copa Argentina 2025 marcó un antes y un después para Independiente Rivadavia, que consiguió su primera estrella nacional y escribió una de las páginas más emotivas en la historia del fútbol mendocino.
Miles de hinchas celebraron en las tribunas y en toda la provincia, conscientes de haber sido testigos de una gesta inolvidable.

El equipo de Berti cerró una campaña brillante, en la que eliminó a rivales de jerarquía y demostró que el esfuerzo, la entrega y la unión pueden más que cualquier obstáculo.
Córdoba fue testigo de una noche épica en la que un club del interior, con coraje y corazón, rompió todos los pronósticos y levantó la Copa Argentina 2025.








