Cada 5 de junio se conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente, una jornada proclamada por la ONU en 1972 para fomentar la conciencia y la acción global en favor de la protección del planeta. En esta edición 2025, el lema propuesto es “Juntos, podemos vencer la contaminación por plásticos”, una problemática que afecta no solo a la naturaleza, sino también al cuerpo humano a través de los microplásticos.
Durante esta fecha se impulsan campañas, programas y actividades organizadas por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), con el objetivo de promover prácticas ecológicas y generar compromisos en gobiernos, empresas y la sociedad civil.

Más allá de las grandes decisiones políticas o empresariales, la acción individual es clave. Adoptar hábitos sustentables en la vida diaria puede generar un impacto positivo a largo plazo. Algunas prácticas recomendadas incluyen:
- Separar residuos y reciclar: Clasificar basura en plásticos, papel, vidrio, metal y orgánicos. Usar centros de reciclado siempre que sea posible.
- Reducir el uso del automóvil: Priorizar el transporte público, la bicicleta o caminar para trayectos cortos.
- Elegir productos reutilizables: Sustituir elementos descartables por alternativas duraderas, como botellas térmicas, bolsas de tela y frascos de vidrio.
- Consumir moda responsable: Evitar la «fast fashion» y optar por prendas de segunda mano o de producción sostenible.
- Ahorrar energía: Apagar luces innecesarias, revisar caños con pérdidas, desenchufar dispositivos que no se usan.

El Día del Medio Ambiente es una oportunidad para repensar nuestras conductas y avanzar hacia un modelo más sustentable, basado en el respeto y la preservación del entorno que habitamos.










