La Policía de Entre Ríos manifestó su creciente preocupación por el aumento de ataques con armas de fuego contra efectivos en distintos puntos de la provincia. El último episodio ocurrió este viernes de madrugada en Santa Elena, donde dos policías rurales fueron emboscados a tiros mientras patrullaban un campo de la zona.
El hecho se registró alrededor de las 0:30 en un establecimiento rural ubicado a unos cuatro kilómetros de la ciudad, sobre la ruta de acceso a Santa Elena, departamento La Paz. Los agentes pertenecen a la Brigada Quebracho de Prevención de Delitos Rurales, que venía realizando operativos ante reiterados casos de abigeato y cuatrerismo en la región.
Según confirmaron fuentes policiales a Elochodigital, los oficiales se encontraban caminando por el interior del campo cuando fueron atacados a balazos desde la oscuridad. Uno de ellos, de 44 años, recibió un disparo en el brazo que le provocó una herida con entrada y salida. El segundo, de 26 años, fue alcanzado por un proyectil en el pecho y otro que le rozó el hombro.
La bala que impactó en el tórax fue detenida por el chaleco antibalas, lo que le salvó la vida.
Tras el ataque, ambos oficiales fueron auxiliados por compañeros de la brigada y trasladados de urgencia al hospital local, donde recibieron atención médica y fueron dados de alta horas después. Las lesiones fueron catalogadas como leves, según informó la fuerza.
Por el momento, no se brindaron detalles sobre el calibre de las armas utilizadas ni el origen exacto de los disparos, para no entorpecer la investigación. En el lugar trabajan equipos de Delitos Rurales, la Comisaría de Santa Elena y la Departamental La Paz, quienes buscan a los autores del ataque.
Un contexto de violencia creciente
Este episodio se suma a una serie de ataques recientes contra efectivos policiales en la provincia. Hace tres meses, otra patrulla rural fue agredida con disparos en la misma zona, y la semana pasada una embarcación de la Policía Naval fue baleada en las islas de Victoria durante un operativo de búsqueda.
Ante esta situación, el ministro de Seguridad provincial, Néstor Roncaglia, anunció que la Policía está reforzando el entrenamiento y el equipamiento de sus agentes rurales.
“No se puede enviar a nuestros policías a patrullar zonas calientes desprotegidos”, advirtió el funcionario, confirmando que se incorporarán fusiles FAL y medidas de protección adicionales para los patrullajes rurales.
El ataque en Santa Elena vuelve a encender las alarmas dentro de la fuerza y refuerza la preocupación por la seguridad del personal policial que actúa en zonas de riesgo.
