
El principal acusado por el crimen de Jazmín González, Yamil Cabrera, no se presentó a la audiencia judicial prevista para este miércoles en los Tribunales de Paraná, debido a su delicado estado físico y psíquico.
Según confirmaron fuentes judiciales, la jueza Marina Barbagelata resolvió extender su detención por siete días, en un centro médico a definir, mientras el acusado permanece bajo seguimiento profesional.
De acuerdo con lo informado por su abogado defensor, José Barbagelata, Cabrera —quien fue apuñalado tras el homicidio de la joven de 16 años en Bajada Grande— recién salió de terapia intensiva y entró en crisis emocional al ser informado por su madre sobre el desenlace del caso.
“Los siete días son un plazo: si la evaluación es buena, estamos en condiciones de imputarlo mañana”, explicó el fiscal Laureano Dato, en declaraciones a Canal 9 Litoral, y adelantó que las medidas de coerción que pedirá el Ministerio Público serán “importantes”, dada la gravedad de la acusación.
De esta manera, Cabrera seguirá internado en el Hospital San Martín, aunque no se descarta su traslado al Hospital Escuela de Salud Mental para continuar con su tratamiento.
Yamil Cabrera, el autor del disparo letal
Las pericias balísticas confirmaron que el proyectil extraído del cuerpo de Jazmín González corresponde al arma de fuego calibre .38 secuestrada durante un allanamiento en la vivienda de Cabrera.
Además, la Fiscalía espera los resultados de la pericia del celular de Julián Manrique, otro de los imputados en la causa.
De acuerdo con la hipótesis judicial, Cabrera habría sido quien efectuó los disparos durante la violenta secuencia que terminó con la muerte de la adolescente.
Según la reconstrucción del hecho, Cabrera disparó primero contra una persona que intentaba agredirlo y, en un segundo disparo, impactó accidentalmente en el cráneo de Jazmín González, provocándole la muerte.
El rol de Julián Manrique en el crimen
El segundo acusado, Julián Manrique, es señalado como el conductor de la motocicleta en la que viajaba Jazmín.
La Fiscalía sostiene que Manrique también disparó con un arma de 9 mm, y que esa pistola fue luego entregada a otra persona, aunque la Policía la recuperó posteriormente.
La Policía Científica determinó que las vainas servidas halladas en el lugar pertenecen a esa arma, lo que refuerza la acusación en su contra.
Asimismo, el análisis del teléfono celular de Manrique permitió reconstruir el contexto previo al homicidio, incluyendo los mensajes y contactos a través de los cuales buscó a Jazmín para asistir a una fiesta, aportando elementos clave a la investigación.
Posibles penas y calificación del caso
De acuerdo con las imputaciones que evalúa el Ministerio Público, Yamil Cabrera podría enfrentar penas superiores a 10 años de prisión por homicidio agravado con el uso de arma de fuego.
Por su parte, Julián Manrique enfrentará cargos por homicidio en grado de tentativa, portación ilegal de arma de guerra y provisión ilegal de arma de fuego, delitos cuyas penas superan los siete años de cumplimiento efectivo.










