Debido a la pronunciada bajante del río Paraná, que actualmente se encuentra apenas por encima del metro de altura, las playas del Balneario Municipal no están habilitadas para el ingreso al agua. La medida, que también se tomó días atrás con la playa de Bajada Grande, responde a razones de seguridad.
La principal preocupación es que la baja en el nivel del río ha acercado las playas al canal, donde la corriente es más rápida y la profundidad mucho mayor que la de la costa. Ante esta situación, mover el boyado implicaría riesgos significativos tanto para bañistas como para quienes supervisan las áreas.
Medidas preventivas y cartelería
La Municipalidad ha colocado carteles informativos en los principales balnearios, incluidos el Thompson, el Municipal y Bajada Grande, para advertir tanto a los vecinos como a los turistas sobre la prohibición de ingresar al agua. Asimismo, se solicita a las personas que respeten las indicaciones de los guardavidas apostados en cada zona, con el objetivo de evitar accidentes.
Alternativas para disfrutar del espacio
Aunque el ingreso al agua está prohibido, las autoridades invitan a la comunidad a disfrutar de los otros atractivos que ofrecen los balnearios, como áreas recreativas y espacios para el esparcimiento.
Esperando la recuperación del río
Desde la Municipalidad aclararon que esta medida estará vigente hasta que el río Paraná recupere niveles más altos que garanticen la seguridad en las playas. Aunque el río Iguazú ha comenzado a elevar su nivel, el descenso del Paraná aguas abajo sigue siendo significativo.
El Municipio asegura que, una vez que las condiciones sean seguras, los balnearios serán habilitados nuevamente para el uso pleno de los ciudadanos y turistas.










